Los locales cuentan con una puerta al exterior acristalada y están provistas de un visillo por la parte de dentro que permite observar la calle con la mayor discreción.
El interior del local es de 4 metros cuadrados y cuenta con todo lo necesario para empezar desde el primer día: una cómoda silla para mirar por el visillo de la puerta, un aseo para las necesidades básicas y una falsa puerta para dar la impresión de estar en una casa de verdad.