En casa no paramos de hablar de lo contento que está el tilo desde que le hemos puesto el cartel. El arbolito lo compré hace dos años en la tienda de la familia Pàmies (unos cracks!) y mide no más dos palmos. Al fondo el melón. Por favor, si alguien sabe de melones que me diga cuándo es el momento de cosecharlo.


