El año pasado planté un par de tomateras cherry a las que regué muy poco y que me dieron la increíble cifra de 3 tomatitos de los que guardé las semillas. La idea es ir haciéndolas un poco más resistentes en cada generación (lo de la epigenética). Este año tenemos la segunda generación de Wild Tomato Cherries, muchas ya han sido arrasadas por caracoles y como siga sin llover voy a tener que regarlas un poco. (Las tomateras están abajo, son muy, muy pequeñas y están bastante demacradas por los caracoles)