Este es el tipo de diseño gráfico que merece ser reivindicado: hecho a mano, muy simple, sin efectos especiales. Un cartel humilde pero sincero.
Me gusta el color de fondo (magistral), el juego de tamaños con las letras (una genialidad) y la ultra simplicidad (hurra y bravo). Todo en este ejemplo es perfecto.
La fotografía es de la región de Ilam, al este de Nepal.
Pero si lo de antes era una genialidad lo que viene ahora es casi una manifestación de Dios:
Aquí el artista ya se puso un poco más creativo, los textos tienen sombra, incluye una estrella y un juego con las curvas en el texto principal PERO, aunque todo eso está muy bien, la cualidad que hace que este diseño haga vibrar el alma cualquier persona con un mínimo de sensibilidad poética es el color: la combinación de ESE amarillo junto a ESE rojo y ESE azul es una explosión de ARTE con mayúsculas.
No sé quien ha hecho este diseño pero ahora mismo lo llevaría a hombros por todo el mundo para que lo adoraran como se merece.